Hemos hablado la semana pasada de la oscuridad y hoy glosaremos el miedo. La desconfianza impide ver la realidad objetiva y desplaza todo otro sentimiento cuando embarga a las personas. Todos sabemos lo que es el miedo y todos lo hemos sufrido y lo seguiremos sufriendo. El miedo motiva conductas de protección, tanto para la supervivencia física como para la psicológica. En el primer caso, su objetivo principal es preservar la vida, por lo que se activa ante la percepción de un peligro para el organismo. 

Leemos en Parashat Beshalaj el temor que tuvieron los israelitas a las orillas del Yam Suf, atrapados entre el mar y el ejército egipcio que los perseguía:

“Cuando Faraón logró acercarse, los hijos de Israel empezaron a alzar los ojos, y aquí venían los egipcios marchando tras ellos; y a los hijos de Israel les dio mucho miedo, y empezaron a clamar a .A.”

“Entonces Moshé dijo al pueblo: “No tengan miedo. Estén firmes y vean la salvación de .A., que él ejecutará para ustedes hoy. Pues a los egipcios que ustedes realmente ven hoy, no los volverán a ver, no, nunca jamás.” (Shemot 14:13).

Moshé instó al pueblo a no tener miedo para que pudieran centrar su atención en los acontecimientos que se desarrollaron y que se seguían desenvolviendo. Sus palabras que indicaban que esos momentos no se repetirían, indicaban que era importante que los experimenten total y profundamente. Había que aprender a refrenar la ansiedad y la preocupación por el futuro. Y había que disfrutar ese momento pese a la circunstancias o quizás por ellas.  

La Torá presenta Shirat Hayam – el Cántico del cruce del mar-, diciendo, “En aquella ocasión Moshé y los hijos de Israel procedieron a cantar esta canción a .A…” (15: 1).

La frase inusual “Az Yashir” con la que la Torá presenta el Shirat Hayam enfatiza que el pueblo cantó esta canción de alabanza “Az” – consecuentemente- allí mismo, sin esperar.  

Nuestras debilidades son consistentes y no siempre nos permiten agradecer porque tampoco vemos la grandeza de lo que nos sucede. Somos caprichosos, inestables e inconsistentes. Y no sabemos agradecer. Tentados y atraídos para actuar incorrectamente, descubrimos, al superar el temor, que teníamos inspiración y motivación para cantar elogios. Pero, nuestros antepasados lo hicieron Az, espontánea e inmediatamente, sin demora, antes de que la inspiración disminuya, para completar su canción. Quizás el cántico Az Yashir, sirvió para espantar el miedo. Por un instante el temor desapareció.   

Podemos hacer nuestro mejor esfuerzo en cualquier momento, como frente al mar, y nos sentiremos inspirados y conducidos a grandes alturas. Cuando nos sentimos poco inspirados, en períodos en los que nos enfrentamos a dificultades y desafíos difíciles, debemos recurrir a la actitud que enseña la palabra “Az”.  Nuestro objetivo debe ser “Az Yashir” para ejercer el máximo esfuerzo en todo momento, incluso cuando no podamos lograr los mismos resultados.

Así aprenderemos a agradecer, a elogiar, a cantar, a vivir, sin miedo, recelo y aprensión, en momentos difíciles, y en los momentos que nos parecen escasos de alegría y gloria. Con “Az Yashir” descubriremos que hay más milagros que los que alcanzamos a ver, y nos entrenaremos en el difícil arte del agradecimiento.

2 Comments

  • beshalaj 2020 – Yerahmiel Barylka, 5 febrero, 2020 @ 10:08 am Reply

    […] Leer mas ARTÍCULOS de beshalaj […]

  • Yosef(jose miguel lopez orejon, 31 enero, 2023 @ 7:56 pm Reply

    Cuando pasamos por una etapa dificil..la unica solucion es pedir ayuda a Adonay y seguir con esperanza hacia adelante…luchando ysacar fuerza y positivismo..Ya habra tiempo derelajarse…despues agradecer a Adonay y darle las gracias ..todos los dias…gracias Rav

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